J.L.14 de abril de 2018, 1:53
Estoy de acuerdo con el análisis que hacéis, sois buenos en esto filólogo e historiadores. Creo que todo lo que exponéis influye en mayor o menor medida. Recojo lo que habéis ido diciendo hasta ahora y comento (desde la ironía-mayéutica socrática más para suscitar debate que para argumentar categóricamente):
-UNO- Es verdad que se puede achacar al PSOE cierto alejamiento de la clase obrera, pero IU mantuvo una postura más cercana a los ideales más radicales y no le fue muy bien que digamos (los obreros se alejaron de ellos, al menos una gran parte se sintió más atraída por el PSOE. Luego el PSOE se supo adaptar bien a las circunstancias, ¿no?). (¿Cómo le hubiera ido al PSOE, a la izquierda española en general y a los éxitos aportados por González y ZP al estado del bienestar sin esta "adaptación"?)... Ahí queda.
-DOS- Es verdad que la izquierda se sintió desbordada por el neoliberalismo y quizá no creó una cultura propia, pero sí que ofreció una alternativa. El neoliberalismo (no confundir con conservadurismo y mucho menos con reaccionismo retrógrado) creo que tiene algunos componentes de izquierda. Expongo: regirse por una demanda solvente (ley de mercado, economía por encima de la persona...) es tan poco de izquierda como regirse por una demanda dirigida (ley de planificación estatalista, ideología por encima de la persona...). (¿Puede ser que el desbordamiento neoliberal del que habláis se produjera por plantear una oposición ciega en lugar de encauzar, potenciar, nutrir y desarrollar las semillas positivas que también están en el neoliberalismo? ¿No hay objetivos comunes que se pueden potenciar desde opciones radicalmente diferentes y hasta opuestas lo que la persona -como sujeto individual y social- quiere?). Si lo quiere, ¿por qué no se le ofrece? Si no se le ofrece, ¿por qué extrañarse cuando se van a comprarlo a otra tienda?
-TRES- El abandono de las nuevas generaciones es patente. Los hechos lo confirman y es irrefutable... Muchos (en su mayoría jóvenes y no tan jóvenes desencantado) se han ido hacia otras opciones que han sabido presentar mejor el "producto" (buen marketing, lo reconozco... aunque peor "producto"). ¿Qué es lo que ofrecen y cómo lo presentan para que resulte más atractivo? ¿Cómo es posible que teniendo el PSOE un "producto" mejor (valoración enteramente subjetiva, discutible) se esté valorizando a un precio menor?
-CUATRO- Los partidos "tradicionales" han abandonado a las nuevas generaciones y las nuevas generaciones han abandonado a los partidos "tradicionales". Esto es buenísimo porque significa que sigue habiendo esperanza. ¿Dónde se perdió el sendero?... ¿en el momento en que los líderes dejaron de ser líderes y pasaron a ser solo dirigentes? (pues que vuelvan los líderes); ¿cuando se dejó de ofrecer un producto izquierda porque el neoliberal se consumía más? (pues ofrezcamos de nuevo el nuestro); ¿en qué momento se desvlorizó el significado y sentido que aporta a la nueva clase obrera? (pues analiza quién es ahora el nuevo sujeto de izquierda y dale respuesta); ¿cuándo se perdió el rumbo con "ideologías" equivocadas, dónde perdimos al individuo (como sujeto activo personal y social), en qué campaña ya no se ofreció un objetivo atractivo por el que luchar...
Cualquier análisis histórico que hagamos (con las limitaciones que Juan Manuel reconoce), tiene que tener un objetivo reivindicativo y sinérgico en mente.
-UNO- Es verdad que se puede achacar al PSOE cierto alejamiento de la clase obrera, pero IU mantuvo una postura más cercana a los ideales más radicales y no le fue muy bien que digamos (los obreros se alejaron de ellos, al menos una gran parte se sintió más atraída por el PSOE. Luego el PSOE se supo adaptar bien a las circunstancias, ¿no?). (¿Cómo le hubiera ido al PSOE, a la izquierda española en general y a los éxitos aportados por González y ZP al estado del bienestar sin esta "adaptación"?)... Ahí queda.
-DOS- Es verdad que la izquierda se sintió desbordada por el neoliberalismo y quizá no creó una cultura propia, pero sí que ofreció una alternativa. El neoliberalismo (no confundir con conservadurismo y mucho menos con reaccionismo retrógrado) creo que tiene algunos componentes de izquierda. Expongo: regirse por una demanda solvente (ley de mercado, economía por encima de la persona...) es tan poco de izquierda como regirse por una demanda dirigida (ley de planificación estatalista, ideología por encima de la persona...). (¿Puede ser que el desbordamiento neoliberal del que habláis se produjera por plantear una oposición ciega en lugar de encauzar, potenciar, nutrir y desarrollar las semillas positivas que también están en el neoliberalismo? ¿No hay objetivos comunes que se pueden potenciar desde opciones radicalmente diferentes y hasta opuestas lo que la persona -como sujeto individual y social- quiere?). Si lo quiere, ¿por qué no se le ofrece? Si no se le ofrece, ¿por qué extrañarse cuando se van a comprarlo a otra tienda?
-TRES- El abandono de las nuevas generaciones es patente. Los hechos lo confirman y es irrefutable... Muchos (en su mayoría jóvenes y no tan jóvenes desencantado) se han ido hacia otras opciones que han sabido presentar mejor el "producto" (buen marketing, lo reconozco... aunque peor "producto"). ¿Qué es lo que ofrecen y cómo lo presentan para que resulte más atractivo? ¿Cómo es posible que teniendo el PSOE un "producto" mejor (valoración enteramente subjetiva, discutible) se esté valorizando a un precio menor?
-CUATRO- Los partidos "tradicionales" han abandonado a las nuevas generaciones y las nuevas generaciones han abandonado a los partidos "tradicionales". Esto es buenísimo porque significa que sigue habiendo esperanza. ¿Dónde se perdió el sendero?... ¿en el momento en que los líderes dejaron de ser líderes y pasaron a ser solo dirigentes? (pues que vuelvan los líderes); ¿cuando se dejó de ofrecer un producto izquierda porque el neoliberal se consumía más? (pues ofrezcamos de nuevo el nuestro); ¿en qué momento se desvlorizó el significado y sentido que aporta a la nueva clase obrera? (pues analiza quién es ahora el nuevo sujeto de izquierda y dale respuesta); ¿cuándo se perdió el rumbo con "ideologías" equivocadas, dónde perdimos al individuo (como sujeto activo personal y social), en qué campaña ya no se ofreció un objetivo atractivo por el que luchar...
Cualquier análisis histórico que hagamos (con las limitaciones que Juan Manuel reconoce), tiene que tener un objetivo reivindicativo y sinérgico en mente.
